HISTORIA

La Fundación Chilena de Cultura fue constituida el 8 de agosto de 1957 con el objetivo de facilitar la educación científica, cultural, espiritual, etc. a toda clase de personas sin fines de lucro. Se le concedió la personalidad jurídica por el decreto n. 5.803 del Ministerio de Justicia de 16 de diciembre de 1957. Sus fundadores fueron los señores Luis Ochagavía, Fernando Hurtado, Juan de Dios Ríos, Sergio Della Maggiora, Carlos Cuevas, Guillermo Noguera y Eduardo Infante. A partir de entonces el consejo directivo ha funcionado de modo regular hasta la actualidad renovando de modo periódico a sus integrantes.

Los fundadores participaban de las actividades impulsadas por el Opus Dei, institución de la Iglesia Católica que busca difundir el llamado a la santidad en la vida diaria, y querían a través de esta entidad jurídica impulsar iniciativas educativas autónomas en las que el Opus Dei se encargara de la atención espiritual.

Se constituyó con un fondo inicial de dos millones de pesos reunidos a través de erogaciones de los propios fundadores y se estableció que cualquier renta que proceda de esos fondos incrementará el patrimonio de la Fundación.

Las primeras iniciativas que impulsó la Fundación Chilena de Cultura fueron la Escuela Agrícola Las Garzas en la comuna de Chimbarongo y la casa de actividades Antullanca en Lo Barnechea, y ambas han beneficiado hasta la actualidad a cientos de personas y familias.

También promovió centros culturales en la década de 1970 y 1980, que por el desarrollo alcanzado se independizaron de la fundación formando entidades de características similares con carácter autónomo, algunas de la cuales siguen aportando al desarrollo intelectual de muchas personas hasta la actualidad.